El Museo Virtual de la Moda levanta el telón!

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El Museo Virtual de la Moda levanta el telón!

Moda; Fashion; Heritage; Museus
Después de recorrer más de 5984 km, de más de un año de incontables horas de documentación, de miles de fotos, de horas de selección y retoques de las mejores imágenes, de reuniones de planteamiento, de diseño (y rediseño) de la web, de redactar contenidos y un largo etcétera, el Museu Virtual de la Moda de Cataluña es una realidad, gracias al impulso definitivo que conlleva ganar el Premi Lluis Carulla 2016 y la gran labor realizada por el equipo de Walden y sus colaboradores.

La Virtualidad

Para nosotros era importante que las piezas que queríamos formaran parte del Museo Virtual de la Moda se mantuvieran en todo momento vinculadas a su pertenencia local. Es precisamente esta dimensión y su carácter íntimo lo que dan sentido a este patrimonio: la capacidad de ser contenedores de memoria. Un museo que permitiera reunir, virtualmente, todas estas piezas sin que perdieran su imbricación con el territorio permitía no sólo darlas a conocer de manera global, si no además potenciar sus voces locales.

Los datos

Hemos intentado que la información que cada piezas ofrece sea lo que permite contextualizarla, observarla y entenderla en el contexto histórico de su época. Queremos que cada vestido, blusa, camisa o chaleco sea un viaje al tiempo en el que va a existir, sea a través de la revistas de moda del momento o a través de información externa que permita comprenderla, construyendo a su alrededor una trama de información detallada.

De igual manera, las fotografías que acompañan a dicha información permiten conocer de muy cerca los detalles íntimos cada pieza, mostrando partes que a menudo quedan escondidas al exponerlas, como los interiores o las costuras.

Las fotografías

Uno de los pilares de este proyecto, así como uno de sus puntos fuertes, son las diversas fotografías que se muestran de cada pieza. Él equipos de Walden viajaba con un par de maniquíes sobre los cuales se adaptaban las distintas prendas. A veces, blusas estrechas vestidas con corsés, quedaban pequeñas y no permitían ser abrochadas. Lejos de asustarnos, echarnos atrás o o de dejar de fotografiar aquellas piezas que no quedaban bien vestidas, nosotros los enseñamos y explicamos: el vestido es un  los elementos patrimoniales más difíciles de exponer puesto que cada pieza tiene unas características propias que requieren maniquíes específicos.

Ese proyecto hubiera sido inviable si hubiésemos tenido como objetivo exponer tordas y cada una de las prendas en su soporte idóneo; optamos por mostrarlas de la manera más óptima teniendo en cuenta los recursos existentes. A veces no concordaban con nuestros maniquíes pero en otros casos el estado de conservación obligaba a que las piezas se tuvieran que fotografiar en plano; otras hemos tenido que inventar la manera de recrear los volúmenes de las estructuras interiores que requerían las piezas, improvisando miriñaques  y polizones aquí y allá. Y si esto nos hubiera dado miedo, hoy no estaríamos aquí.

De lo que se traba siempre, siempre era de dar legibilidad y visibilizar las colecciones.

El equipo

Y yo, Laura, después de haber dirigido este proyecto, puedo asegurar que detrás hay un equipo de profesionales ilusionados, comprometidos y eficaces que lo han hecho posible. Desde aquí muchas gracias, Bárbara, Marta, Ari, Isa, Sandra, Sabina, Jaume, Joan, Marcel, Cristina y Ares, y a todos los que nos han acompañado en esta aventura y que han hecho que el resultado fuera el que es.

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